El 4 de febrero, conocido como Jueves Lardero, comienza el carnaval, una fiesta que este año se prolongará hasta el día 10, Miércoles de Ceniza. Es época de las divertidas chirigotas, pero también están los pasacalles, los disfraces, la música con la que amenizar el ambiente y la comida, pues tenemos la oportunidad de degustar deliciosas recetas y descubrir nuevos platos.
Es una fiesta de origen cristiano que en nuestro país ya se celebraba en la Edad Media y que que antecede a la época de la Cuaresma, un tiempo en el que comer carne quedaba prohibido.
Quizás sea por esta abstinencia, que a lo largo de todos estos siglos entre gastronomía y carnaval se haya creado una relación muy especial en la que este alimento tiene un papel protagonista durante estos días. Este es el caso del botillo, una carne sometida a procesos de ahumado y de semicurado que en Lugo, Orense y El Bierzo es muy típica y con la que puede preparase un exquisito revuelto o un pastel de botillo, entre otras sugerencias.
En estos días de celebración, la butifarra de huevo, los guisos y las parrilladas de chorizo y de cerdo tienen asimismo reservado su espacio en la mesa y, en el caso de Madrid, el cocido también. A pesar de ser una receta que se come habitualmente, en carnaval resulta especial si se tiene en cuenta que es una receta para comer en familia que está ligada al frío del invierno y a la época de matanzas. También descubrimos el llamado cocido de entroido que se elabora con los siguientes alimentos: chorizo, panceta, rabo, lacón, repollo, gallina, berzas, patatas y garbanzos.
Y aunque nos encontramos en Madrid, no queremos olvidarnos de dos recetas que en Cataluña y Canarias tienen mucho peso. En la primera, un embutido hecho con estómago de cerdo relleno de pasas, huevos, pan y carne picada. En la segunda, las sopas de miel que llevan miel de caña, pan, canela, corteza de limón y anís verde.
Para los amantes del dulce las sugerencias son varias: desde buñuelos a leche frita, pasando por las orejas de carnaval. Todos ellas comparten ingredientes como la harina, los huevos, el azúcar, el agua o la mantequilla. Otras propuestas son las cocas de chicharrones y la cuajada de carnaval.
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