La Concejalía de Medio Ambiente finalizó la pasada semana la creación de siete nuevas plataformas para los restos vegetales domésticos, lo que ha generado las dudas entre algunos vecinos.
Según informó el Consistorio, las denominadas «plataformas verdes» están ubicadas en las urbanizaciones El Bosque, Castillo y Campodón. En concreto en las calles Miño con Pisuerga; Miño con Júcar; Miño con Narcea; Bosque; Prado; Peñíscola; y Cortijo.
La idea es que los vecinos puedan depositar de forma opcional la siega o poda en estas plataformas, de manera que podrá elegir libremente entre seguir dejando los restos frente a su vivienda o llevarlos a estos nuevos espacios. Han recalcado que «contarán con un servicio de recogida más ágil y frecuente».
El objetivo es mejorar la eficiencia y rapidez en la recogida por parte de la empresa responsable, según han argumentado, manteniendo las calles y aceras libres de obstáculos y mejorar la eficiencia de las rutas de recogida.
Según el concejal de Medio Ambiente, Ernesto Serigós, cuya Concejalía está inmersa en la licitación del nuevo contrato de limpieza viaria, ha indicado que si este proyecto tiene buena acogida se ampliarán las plataformas durante 2025.
La iniciativa ha generado algunas dudas por parte de algunos vecinos. Una de ellas ha apuntado en redes sociales: «no tiene ningún sentido, salvo para los vecinos que lo tengan al lado de sus casas». Otra cree que «lo malo» es que no todos tienen un vehículo con capacidad para transportar la poda. Otro se pregunta cuánto cuesta la creación de estas plataformas y si va a compensar ese gasto.
Una villaodonense cuenta su experiencia: «tengo una enfrente de casa y la verdad es que la situación de los cubos de basura en la calle Cortijo es deplorable. Además, cada vez los van moviendo más de sitio; en dos años, ya han avanzado media calle y siempre llenos de basura, restos de muebles, cartones sin recoger… Ahora mi sorpresa es el tema de los residuos vegetales. Imaginaros una plataforma llena de restos de poda en bolsa, sin bolsa…Junto a los cubos de basura cerca; es un nido de porquería impresionante. Además, desde que se está utilizando, no he visto que sea más ágil la recogida. Una vez han pasado y a este ritmo, eso se llena y es un nido de ratas. Si van hacer algo así, asegúrense de que la recogida es muy habitual, porque entre la basura y esto, ya lo que nos faltaba».
