La Guardia Civil detuvo a cinco personas tras cuatro registros, en una vivienda de Boadilla del Monte, otra en Madrid, una finca de Villaviciosa de Odón y en un estanco de la capital.
Robaron perfumes y botellas de alcohol premium.
Agentes de la Benemérica del Área de Investigación de Navalcarnero y del Equipo de Policía Judicial de Arroyomolinos han logrado desmantelar una organización riminal en el marco de la ‘Operación Gredos’, especializada en el robo con fuerza por el procedimiento del butrón, que operaba a nivel nacional y que ha logrado hacerse con un botín de casi un millón y medio de euros en apenas dos meses.
Esta investigación surgió a raíz de un robo con fuerza sufrido a finales del mes de enero en una nave industrial situada en Sevilla La Nueva, dedicada a la distribución de bebidas. Lograron hacerse con productos valorados en 60.000 euros, con un camión y con una furgoneta que demás posteriormente utilizaron para transportar la carga.
El avance de la operación permitió relacionar este vehículo en otro robo que se produjo a mediados de febrero en otra nave situada en Alovera (Guadalajara) y dedicada también a la distribución de bebidas. Gracias al análisis de las circunstancias de los dos actos delictivos, los agentes constataron que no se trataba de hechos aislados, ya que existían varias similitudes tanto en el modus operandi, como en el perfil de los autores.
Los agentes relacionaron a uno de los sospechosos identificados con otros seis robos más en establecimientos de distribuidoras de bebidas, centros logísticos y almacenes de tabaco, ropa y perfumes en las provincias de Madrid, La Rioja, Ciudad Real, Guadalajara, Valencia y Jaén. Esto les llevó hasta una organización criminal muy activa y altamente especializada en procedimiento del butrón.
Robo de vehículos
Para llevar a cabo los hechos, previamente sustraían vehículos que utilizaban para las aproximaciones y las huidas, o bien robaban de las propias instalaciones furgonetas con capacidad de carga si el botín era de difícil transporte.
Una vez que seleccionado el establecimiento, estudiaban los sistemas de seguridad con los que contaba el almacén, como cámaras de seguridad y alarmas, así como los lugares de acceso y de huida.
Posteriormente, el robo era ejecutado en horario de madrugada y durante el fin de semana o festivo, para así asegurarse de no ser sorprendidos y de que los trabajadores no se dieran cuenta hasta pasados unos días, cuando la mercancía ya estaba asegurada en un lugar seguro de la organización.
Contaban con inhibidores de frecuencia muy avanzados que anulaban los sistemas de seguridad y utilizando aparatos walkie-talkie en sus comunicaciones.
Un estanco
Todas las mercancías sustraídas eran guardadas en una finca rústica situada en Villaviciosa de Odón, desde donde las iban sacando poco a poco, distribuyéndolas en dos estancos gestionados por el cabecilla de la organización.
A posteriori, la única mujer del grupo y pareja del líder, blanqueaba el dinero a través de sociedades y entramados empresariales y adquiría propiedades inmobiliarias.
En total, la organización se ha hecho con un botín valorado en 1.473.763 euros siendo el robo más suculento el que cometieron en un distribuidor del polígono industrial de Arroyo Culebro de Pinto, en el que sustrajeron 712.000 euros en perfumería y botellas de alcohol premium, exclusivas y de ediciones limitadas; algunas de ellas valoradas en 8.000 euros la botella.
Material sustraído
Así mismo se ha recuperado gran parte del material sustraído; 89.435 euros en moneda fraccionada; 7 vehículos robados; herramientas; y material electrónico que utilizaban en sus asaltos, como inhibidores y rastreadores de frecuencia; y cinco armas de fuego que procedían de un robo en un domicilio de Mérida.
Los detenidos por la Guardia Civil son cuatro hombres y una mujer de origen español, rumano y kosovar con edades comprendidas entre los 37 y los 58 años y a quienes por estos hechos se les imputan los delitos de pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales, delito continuado de robo con fuerza y sustracción de vehículos.
Los mismos han sido puestos a disposición judicial, quien ha decretado el ingreso en prisión de tres de ellos.
Entre otras medidas cautelares se ha decretado el cierre provisional del establecimiento con licencia de estanco.