Los tribunales archivan la causa por el altercado que Esperanza Aguirre mantuvo en Gran Vía con agentes de movilidad mientras Podemos mantiene la querella contra la presidenta del PP de Madrid por vincular al partido de Pablo Iglesias con ETA, Venezuela y el chavismo.
El juez Carlos Valle ha archivado provisionalmente la causa contra Esperanza Aguirre por darse a la fuga después de que los agentes de movilidad le pidieran la documentación para multarla por estacionar su vehículo en el carril bus de Gran Vía de Madrid. «No está acreditada la desobediencia y las lesiones denunciadas», señala Valle.
Los agentes de movilidad denunciaron a la expresidenta de la Comunidad de Madrid y declararon que derribó una de las motos al darse a la fuga pese a que estos le ordenaron que no lo hiciera.
Los agentes siguieron a Aguirre hasta que llegó a su domicilio, donde aparcó el coche en el garaje. Según la expresidenta, no fue consciente de que los funcionarios la siguieron hasta su vivienda. Los policías que presenciaron los hechos apoyaron la versión de que Aguirre pudiera no ser haberse percatado de las órdenes de alto que le dieron, ya que los agentes no llevaban las señales sonoras sino solo las luminosas.
El magistrado considera que la «solución no puede ser otra que el sobreseimiento, pues la denuncia ha sido rebatida por la denunciada, existiendo incluso más apoyos a su versión que a la de los agentes de movilidad denunciantes, y dudas serias hacia la credibilidad de estos». Este auto puede ser recurrido por las partes en un plazo de tres días.
Podemos mantiene la querella
Podemos seguirá adelante con la querella y, según el acta de conciliación, se ratifica en reclamar una rectificación a Aguirre «por haber publicado en su blog y en su Twitter que Podemos ha recibido 3,7 millones de euros de Venezuela y que Podemos está con ETA y con el chavismo«. Todo ello después de que el acto de conciliación entre la presidenta del PP de Madrid y los representantes de Podemos por la demanda interpuesta por Pablo Iglesias en julio ha finalizado sin acuerdo.
Aguirre dice que se limitó a apoyar sus opiniones en informaciones periodísticas. Afirma sentirse víctima de un ataque a la libertad de expresión y califica el proceso de “utilización torticera de los tribunales”.
Por su parte, la secretaria de Análisis Político y Social de Podemos, Carolina Bescansa, apuntó a la salida del juzgado de primera instancia número 97 de Madrid que será la vía judicial la que dirima el caso y ha lamentado los «ataques» a los portavoces de su formación.
Redacción
