La Comunidad de Madrid comprará 80 nuevos, para lo que ha previsto una licitación de 1.094 millones de euros.
El Consejo de Gobierno aprobó ayer esta operación, para lo que va aumentar el endeudamiento de la empresa pública hasta 1.378 millones de euros. La ha justificado debido a las ampliaciones previstas en las líneas 3, 5 y 11 de Metro de Madrid, la construcción de un nuevo trazado en Madrid Nuevo Norte y la necesidad de renovar el material móvil.
De esta forma, comprarán 40 unidades de gálibo estrecho, que circularán por la línea 1, y otras 40 de ancho, que darán servicio a los viajeros de las líneas 6, 8 y 11. Estos 80 trenes constarán de seis coches con pasillos de comunicación entre ellos, de los cuales cuatro serán motores y los otros dos remolques con cabina de conducción en cada extremo.
Los nuevos convoyes también permitirán con su estreno «lograr una mayor eficiencia energética y conseguir una mayor capacidad de transporte público», según han explicado. También cree que «contribuirá a aumentar la calidad del servicio que reciben los ciudadanos, ya que las nuevas unidades de material móvil ofrecen unas prestaciones superiores a muchas de las que hay actualmente en circulación».
Finalmente, han recalcado que este endeudamiento a largo plazo, ha contado con el informe favorable de Dirección General de Política Financiera y Tesorería de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo y de la Comisión de Presupuestos y Hacienda de la Asamblea de Madrid.