A través del libro ‘Urtain. Retrato una época’, cuyo autor, Felipe Luis Manero, lo presentará este viernes a las 20.00 horas.
El periodista deportivo Felipe Luis Manero presentará en la librería Los Libros Salvajes de Villaviciosa de Odón su libro sobre José Manuel Ibar Azpiazu, más conocido como Urtain, el boxeador guipuzcoano campeón de Europa de pesos pesados que fue un ídolo de masas en los años finales del franquismo.
El autor se adentra en el mundo del «héroe caído», como le denomina, un chico criado en un caserío de Cestona (Guipúzcoa) cuyo deporte principal era el levantamiento de piedras, aunque se desenvolvía en otros tradicionales vascos, pero que no sabía boxear. Llegó a levantar bloques de 250 kilos y batió récords y en el mundo guipuzcoano fue conocido como ‘el Tigre de Cestona’.
Tras realizar el servicio militar en Ceuta, un empresario vasco se fijó en él por su físico y se le imaginó como un campeón de boxeo. En 1968 con 24 años se subió al cuadrilátero por primera vez de la mano de su entrenador y manager Miguel Almanzor. A partir de ahí comenzó una trayectoria de combates con 27 kaos con rivales no muy potentes, según los rumores.
En 1970 se proclamó campeón de Europa en el Palacio de los Deportes de Madrid, imponiéndose al alemán Peter Weiland, de nuevo por kao. Eso ayudó a que la sociedad de la época le encumbrase mediáticamente (como si de un Rafa Nadal o Carlos Alcaraz se tratase) y fue objeto de marketing incluyendo a las autoridades del momento, así como asiduo en la farándula española y revistas del corazón.
Su carrera duró hasta 1977; disputó 68 combates, con 53 victorias, 41 de ellas por KO, 11 derrotas y 4 nulos. En total, fue tres veces campeón de España y de Europa de los pesos pesados y los medios de comunicación de esos años del régimen de Franco cubrían sus peleas con exhaustividad.
No volvió a boxeo, mundo del que no guardó buenos recuerdos, y se pasó a la lucha libre; también se convirtió en empresario junto a su hermano. Su situación económica fue a peor en los 90 y ello le llevó al suicidio con 49 años, un 21 de julio de 1992 en su casa de Madrid (tres años después de la entrevista que le hizo Mercedes Milá y que pueden ver a continuación). Fue un juguete roto al que muchos encumbraron rápido, pero que al final dejaron de lado.