El Gobierno regional ha aprobado un plan de acondicionamiento y mejora del firme en esta vía, con una inversión de 3,3 millones de euros.
Estas obras comenzarán en la segunda mitad del próximo año y con ellas se sustituirá el firme actual en todo el trazado que tiene una longitud de 16,84 kilómetros. Su plazo de ejecución será de ocho meses, según ha anunciado la Comunidad de Madrid, y se llevarán a cabo en dos tramos: en el primero de ellos entre los puntos kilométricos 0+000 y el 8+645, donde se sellarán las fisuras, el fresado y la reposición del firme en los lugares más deteriorados. En el segundo , entre los P.K 9+971 al P.K 16+840, con el reciclado del firme, la extensión de una capa intermedia y la posterior de rodadura.
Esta carretera presenta bastante siniestralidad y una intensidad media de tráfico de 22.127 vehículos al día en el tramo que soporta más coches. Y desde el Gobierno regional señalan que estas actuaciones contribuyen “notablemente a mejorar la seguridad en nuestras carreteras y a reducir la siniestralidad”. Y subrayan que han reducido en la última década hasta en un 70 por ciento la mortalidad en las carreteras regionales.
Durante 2016 el Gobierno regional está llevando a cabo una serie de actuaciones de mantenimiento, conservación y mejora de las carreteras regionales, que han supuesto una inversión próxima a los 14 millones de euros en más de 60 intervenciones.