La empresa argumenta que de 2023 a 2024 ha aumentado su uso un 72 por ciento y que 3.000 usuarios utilizan los patinetes eléctricos en Villaviciosa de Odón.
Tras el anuncio que hizo ayer el Ayuntamiento de Villaviciosa de Odón de cancelar la autorización a la empresa Bird para el servicio de patinetes eléctricos en la vía pública, el manager general, Antonio Relaño ha mostrado su sorpresa y ha «considera que la decisión carece de justificación y es injusta», según ha contado a Villaviciosadigital.
Ha querido argumentar con cifras la acogida de este medio de transporte que opera en la localidad desde 2021. Según Bird, en estos tres años ha habido más de 100.000 desplazamientos, con un incremento continuo. En todo el 2023 contabilizaron 26.000, mientras que en 2024, hasta septiembre inclusive han sido 34.000, «un +72% año sobre año», afirma.
En lo que respecta a los usuarios, señala que el pasado año hubo 2.200, mientras que hasta el mes de septiembre inclusive había 3.000.
Relaño ha afirmado que estos datos «han sido verificados y reflejan con precisión el desempeño de nuestro servicio en la localidad».
En un primer momento el Ayto. les dijo que les extendería el permiso, según Bird.
En cuanto al impago de la tasa, 2.000 euros al año, la empresa lo reconoce, pero lo justifica por el hecho de que el Consistorio les había informado en un primer momento que sí les autorizarían a extender el servicio siempre que Bird se ocupase, entre otros requisitos, de la señalización vertical y horizontal de las zonas de aparcamiento que se establecieron para los patinetes eléctricos. “Durante los primeros meses del año hemos estado negociando con el Ayuntamiento el pintado de la señalización; ¿si pintamos, se tendrá que reducir parte de la tasa? La inversión la hacemos nosotros. Evidentemente, no la hemos pagado y lo que hicimos fue solicitar el miércoles pasado el pago para poder seguir operando, pero no recibimos respuesta».
Sobre la falta de contrato, que regule el servicio en el municipio, también lo reconoce y afirman: “suele ser la manera de operar normalmente, con una tasa de ocupación del espacio público».
Por otro lado, Relaño afirma que cuando quebró la otra empresa que operaba con patinetes eléctricos en Villaviciosa de Odón, Bird ayudó a recogerlos porque el Ayuntamiento «no tenía suficiente capacidad».
