El silencio se ha roto de una manera desgarradora. No podría dejar pasar mi Pincelada Cyan sin hablar esta triste realidad. Más de cuarenta víctimas mortales por violencia de género en lo que llevamos de año han lanzado su última queja. Es la única forma de la que han podido salir del sutil entramado violento que han sufrido. Los demás no nos hemos dado cuenta y hemos escuchado su último lamento debido a su muerte.

¿Cómo saber que una mujer sufre maltrato? ¿Cómo saber cuándo se gesta la semilla invisible del dolor? En algunos casos es del todo imposible debido al largo proceso de incomunicación que soportan las víctimas.
Ni qué decir tiene que el maltratador es un ser desequilibrado e inseguro que va tejiendo una delicada telaraña alrededor de la mujer, con la excusa de que es el único que la ama, que quiere protegerla y cuidarla. Y con el fin de no sentirse abandonado, ejerce sobre ella control y dominio.
No es extraño, nuestra sociedad está fundamentada en el modelo de patriarcado con símbolos de supremacía masculina. Cuando estos símbolos se instalan en la realidad diaria con superioridad insana, el daño está asegurado.
No esconderse sería una de las primeras premisas para poner remedio a algo tan inquietante como es el maltrato a mujeres. Pero esto resulta demasiado vergonzoso para ellas, dado que se sienten causantes y no víctimas.
Educar en la igualdad es la base y el principio fundamental para que sociedades futuras no sientan el acoso por ser sencillamente mujeres.
Escuchemos su silencio, abramos nuestros oídos y dejemos que su ahogado grito nos llegue antes que la tortura de su incomunicación.
Evitemos una nueva víctima.
M. Yolanda R. Herranz @MyolRh
Enhorabuena Yolanda, me parece muy apropiado abordar temas tan delicados y desgraciadamente tan frecuentes como este.
Nos hemos acostumbrado a tratar este asunto como una mera estadística de muertes y las mujeres maltratadas parecen ser dignas del menosprecio por parte de politicos y resto de autoridades, que no hacen lo que tienen que hacer para extirpar este mal, que afecta a mujeres en todo el mundo.
Sigue así, un beso
Quizás algún día entre tod@s podremos conseguirlo.
Gracias, Carmen
Muy bien escrito Yolanda, estoy totalmente de acuerdo con lo que dices pero yo pienso que si algunas mujeres no denunciaran en falso, que hay muchas , a esas mujeres que de verdad se las maltrata se las ayudaría mas, se les dedicaría mas tiempo y se las enviarían a casas de acogida, se les pondrían mas psicólogos y no se perdería el tiempo y el dinero de todos nosotros en esas otras mujeres que denuncian en falso, que si os cuentan en las comisarias y juzgados hay muchas. Y a las que de verdad las maltratan que denuncien y hay que ayudarlas a que lo hagan.
Un besito y continua escribiendo
Es verdad, MJ, hay mujeres que cuando su relacion no funciona, se aprovechan de esta ciscunstancia tan delicada y denuncian en falso. Es algo que también tendriamos que evitar. En cambio, hay victimaa que realmente lo son, y siguen silenciando.
Besos!!
Isaac Asimov decía que la violencia es el último recurso de un incompetente, en fin, ojala que esas personas (las víctimas) rompan el silencio para que no les hagan más daño.
Un abrazo Yolanda
MSol
Hola MiSole!! Es una labor de tod@s!!
1000 besos!!
Reflejas muy bien la situacion, la haces real, creible y cercana, haces tomar conciencia del problema. Yo les sigo viendo delincuentes que actuan por egoismo, cada vez menos influenciados socialmente, aunque indudablemente aun de artastren estereotipos del padado. Enhorabuena.
U
Las teclas del móvil son diminutas y mis dedos «como porras». Apreciarás, por ello, faltas/errores que se me escapan. En todo caso quiero expresar lo bien tratado que está el tema, tan polémico por otra parte, toda vez que hoy se da una casuística muy elevada de falsas denuncias con objetivos espúreos (cobro de subsidios, indemnizaciones, etc.) que pueden tapar el bosque. La realidad existe, la violencia machista; y tú, Yolanda, la pones sobre la mesa de forma descarnada, muy inmediata, que nos hace meternos de lleno en el problema. Me gusta, ya te lo he dicho otras veces, lo que dices y cómo lo dices.
Gracias, Luciano, hago lo que puedo; tanto escribiendo como describiendo la situación de muchas mujeres.
Si sólo con escribir pudiera evitar una vítimas más, o mejor aún, erradicar la violencia, mi objetivo y el de muchos de nosotros, estaría cumplido.
PD: tus dedos…como los de casi todos 🙂
Saludos!!