Tras la sorprendente marcha de Rafa Molina al Azuqueca Basket, Villaviciosadigital habló con el exjugador colegial, quien explicó las razones del cambio y pidió perdón a los aficionados villaodonenses.
“Azuqueca no ha venido porque tuviera una oferta de ellos, simplemente, he tenido una incompatibilidad con el entrenador, no nos llegábamos a entender del todo y no estaba feliz en Casvi», explica Molina, quien insiste en que no se ha ido del club por los compañeros con los que estaba «encantado».
El jugador no ha querido entrar al detalle sobre las circunstancias de su marcha aunque sí indicó que el baloncesto es una afición para él y no una profesión, por lo que ha tomado esta decisión ante los «gestos y muchos comentarios» que dice «no tener porqué aguantar» Además, recalca que la causa no han sido las cuatro derrotas, «ni mucho menos porque si hubiéramos ganado hubiera tomado la misma decisión».
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Rafa aclara que lo dejó con Casvi, quedó libre y habló con su representante para ver qué equipos había disponibles. Eligió Azuqueca por la cercanía con su casa en Torrejón de Ardoz.
En la entrevista que Villaviciosadigital hizo al jugador a primeros de diciembre Molina reflejaba planes de futuro muy diferentes al desenlace que ha tenido su etapa en el Casvi. “Cuando hice la entrevista con vosotros había alguna cosilla pero no era importante y la fui dejando pasar, pero luego han ido pasando cosas en diciembre y enero y ya me parecía que no tenía que seguir más porque no estaba nada cómodo».
Por último, se despidió de la afición de Villaviciosa: “Lo siento mucho, saben dónde estoy porque no me voy del baloncesto. Les pido perdón si se han molestado pero lo importante era estar cómo y no lo estaba”.
Redacción