Este martes se ha puesto en marcha en la Comunidad de Madrid el Plan Renove de Electrodomésticos.
Está dotado con 2.780.000 euros y tiene como objetivo fomentar la sustitución de electrodomésticos por otros nuevos de menor consumo energético, han señalado desde el Gobierno regional.
Esta iniciativa supone un beneficio tanto para los comerciantes, que verán incrementadas sus ventas, como para los consumidores, que, además del descuento directo, verán rebajados sus recibos de electricidad, han recalcado.
Para la edición de este año se van a conceder ayudas para la sustitución de frigoríficos, combis, lavadoras o lavavajillas usados por otros de clasificación energética A+++. Los descuentos se realizarán directamente en los establecimientos colaboradores a la hora de adquirir los nuevos electrodomésticos. En el caso de las lavadoras, serán de 70 euros, para los lavavajillas alcanza los 110 euros y, si se trata de frigoríficos y combis, las ayudas serán de 150 euros.
Entre las condiciones para los compradores se fija que el electrodoméstico adquirido y objeto de subvención debe tener como destino final la sustitución de un electrodoméstico ya existente y su instalación dentro del territorio de la Comunidad de Madrid.
El plazo para adquirir los aparatos será desde el 20 de marzo, hasta el agotamiento de los fondos presupuestarios disponibles.
Desde su puesta en marcha en 2006, el Plan Renove de Electrodomésticos ha permitido la sustitución de más de 574.000 aparatos por otros más eficientes; de ellos 259.385 lavadoras, 181.000 frigoríficos, 90.774 lavavajillas, 9.808 congeladores, 19.823 hornos y 13.593 encimeras de inducción.
Para ello, la Comunidad de Madrid ha destinado en total más de 47.000.000 euros, a los que se suman los 2.780.000 euros de la edición de 2018.
Estiman que el reemplazamiento de estos equipos un ahorro energético anual superior a las 23 kilotoneladas equivalentes de petróleo. Con la edición de 2018 se espera conseguir un ahorro energético adicional de 1,4 kilotoneladas, con lo que dejarán de emitirse a la atmósfera más de 6.500 toneladas de CO2 al año.