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Leonardo DiCaprio y Martin Scorsese, flamantes nominados a los Oscar, colaboran por quinta vez en El lobo de Wall Street, el estreno cinematográfico más relevante de este viernes, en el que además llegan a las pantallas Mandela, del mito al hombre, Memorias de mis putas tristes, Oslo 31 de agosto y el documental Asier y yo.
Jordan Belfort, un corredor de bolsa de Nueva York, se niega a cooperar en un caso importante de fraude de valores, en el que están implicados Wall Street, las grandes corporaciones bancarias y la mafia. El FBI aún no lo sabe, pero él es el cabecilla de la trama real de estafadores que aconteció en los años 90. El nivel de ambición de Belfort fue tan grande que llegó a ganar 12 millones de dólares en 3 minutos, presumía de haberse llevado 50 millones en un año.
Parece que fue DiCaprio quien intentó que Scorsese se interesase por esta historia, escrita por el protagonista a modo de libro de memorias, y para la que el veterano director norteamericano reúne además en el reparto, a lo largo de tres horas frenéticas de metraje, al omnipresente Matthew McConaughey, Jonah Hill, Kyle Chandler, Margot Robbier y Jean Dujardin.
Importancia histórica
Fallecido hace un mes, Nelson Mandela es un personaje de gran relevancia histórica cuya figura retrata Mandela, del mito al hombre, filme producido por la compañía de los hermanos Weinstein y que, a diferencia de otros que se han aproximado al expresidente sudafricano, se centra en su trayectoria previa a su paso por la cárcel.
Idris Elba, recordado como el Stringer Bell de la serie The wire, es el encargado de dar vida a Mandela en este filme que toma como base la autobiografía titulada Largo camino hacia la libertad. Realizada por Justin Chadwick (Las hermanas Bolena) y con Naomie Harris como la mujer del exmandatario, cuenta en su banda sonora con un tema de la banda U2 que acaba de ganar el Globo de Oro.
Asier y yo es un documental que llega con algo de polémica. Dirigido por Aitor y Amaia Merino, retrata cómo un tipo llamado Asier y el propio Aitor crecieron juntos en Vascongadas. Fueron juntos a la ikastola y se hicieron grandes amigos. Años después, Aitor se trasladó a vivir a Madrid.
Cuando, en 2002, Asier ingresó en la banda terrorista ETA, Aitor se preguntaba cómo podría hacer entender a sus amigos de Madrid lo que ni él mismo lograba comprender. En cuanto Asier salió de prisión, se propuso hacer una película en la que su amigo pudiera explicar el porqué de su decisión.
Noruega y México
También es novedad en la cartelera Memorias de mis putas tristes, adaptación de una de las últimas novelas del Premio Nobel colombiano Gabriel García Márquez. Producida en México, cuenta la peripecia de «El Sabio», viejo y solterón columnista de un periódico provinciano que se ha pasado la vida pagando los servicios sexuales de las mujeres.
La víspera de su noventa cumpleaños, decide celebrarlo a lo grande: una noche de locura amorosa con una joven virgen. Así, entabla relación con Delgadina, una prostituta que logrará que el anciano experimente por primera vez el amor. Entre las actrices, dos españolas madre e hija: Ángela y Olivia Molina.
Por último, un drama psicológico noruega muy bien recibido por la crítica: Oslo, 31 de agosto. Dirigida por Joachim Trier e proyectó en la sección “Una cierta mirada” del Festival de Cannes, y está nominada al César a la mejor película extranjera.
Anders está a punto de acabar un tratamiento de desintoxicación en un centro rural. Como parte de su terapia, una mañana va a la ciudad para presentarse a una entrevista de trabajo. Aprovechando el permiso, se queda en la ciudad y se encuentra con gente que hacía mucho tiempo que no veía. Se siente profundamente perturbado por las oportunidades que ha desaprovechado y por las personas a las que ha decepcionado. Los problemas se desencadenarán.
Texto: Jaime Soteras (@JaimSot)
Foto: Universal