La presidenta regional, Cristina Cifuentes, ha anunciado que la Comunidad se va a personar como acusación particular en la causa que está siendo investigada como consecuencia de la operación ‘Púnica’ “por razones de transparencia y para una mejor defensa de los intereses de los madrileños y de la Administración regional”.
La presidenta destacó además que, según se desprende de los datos conocidos hasta ahora, “de los presuntos delitos cometidos podría derivarse perjuicio patrimonial para la Comunidad”. Cifuentes ha asegurado que va a ser implacable con cualquier forma de corrupción, “aunque pertenezca al pasado, aunque el mío sea un Gobierno nuevo”. Por ello, ha continuado, “pido a la Justicia que sea rápida, eficaz y precisa en sus investigaciones”.
Advirtió también que si cualquier representante público del Partido Popular resultara imputado en el curso de una investigación judicial será “contundente” como “ya es contundente el Código Ético que han firmado los diputados del grupo Popular que les obliga a abandonar el escaño ante una imputación o investigación formal por cualquier causas relacionada con la corrupción”. En este sentido, ha destacado que la transparencia de la Administración y la prevención de la corrupción son ejes fundamentales de su Gobierno y por ello se ha comprometido a crear un Portal de la Transparencia y a asumir aforamientos.
La jefa del Ejecutivo autonómico ha señalado que su Gobierno “no tiene nada que esconder” y prueba de ello es la auditoría externa en el acuerdo de investidura que se va a iniciar en la próximas semanas. Además, ha indicado que tiene mucho trabajo por delante y que “pondrá en evidencia a los radicales simplemente con una firmeza transparente”.
Eslóganes
Por otra parte, la presidenta ha reiterado que afrontamos un tiempo nuevo que necesita un modo nuevo de hacer política y ha apuntado que “los recién llegados, tanto los más razonables como los más extremistas, están ya descubriendo que una cosa son los eslóganes y otra muy diferente resolver los problemas de los ciudadanos desde responsabilidades concretas de gobierno”.
Así, ha dicho que el Partido Socialista tiene que decidir cuál va a ser su destino “si ser un partido subordinado, auxiliar de los más radicales, o un partido socialdemócrata, como sus homólogos europeos, que pretende ser alternativa de gobierno” y ha criticado que “no hay nada más viejo que ciertos discursos de izquierda que parecen salidos de asambleas de hace cincuenta años”.
La llamada operación ‘Púnica’ se inició el 27 de octubre de 2014, con el arresto por orden del juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, más de 50 políticos, ediles, funcionarios y empresarios por su presunta implicación en una trama de corrupción que adjudicó servicios públicos por valor de 250 millones de euros en dos años a cambio de pagos y comisiones ilegales.
Entre los detenidos se encontraron el ex alcalde de Valdemoro y número dos del PP de Madrid, Francisco Granados, el ex alcalde de Parla, José María Fraile (PSOE), el empresario y ex presidente de Nuevas Generaciones del PP en Valdemor, David Marjaliza, o el ex alcalde de Collado Villalba, Agustín Juárez (PP), entre otros.