Villaviciosa de Odón conmemoró ayer el Día Internacional de las Personas con Discapacidad con un multitudinario acto que protagonizó la periodista y escritora Irene Villa, quien presentó además su último libro, Nunca es demasiado tarde, princesa. La vecina de la localidad afirmó en una entrevista a Villaviciosadigital que el municipio ha mejorado en cuanto a la accesibilidad para los discapacitados, valoró el éxito de su último trabajo, y habló sobre la importancia de la fe en la superación de las dificultades.
Más de 100 personas asistieron al Coliseo de la Cultura de Villaviciosa de Odón para conmemorar el Día Internacional de las Personas con Discapacidad (cuya fecha oficial fue el pasado 3 de diciembre) convocados por la Concejalía de Bienestar Social y la asociación Integravilla.
Irene Villa fue la principal protagonista junto a la presidenta de Integravilla, Mercedes Rodríguez, dos ejemplos de superación que irradiaron optimismo a los allí presentes.
Villa ve en Villaviciosa de Odón «un cambio» de cuando vino en 1995 a ahora. «Casi 20 años después; las aceras, etc. Lo veo mucho mejor en las mejoras para los discapacitados”. Aunque reconoció que no baja mucho al pueblo, puesto que vive en la urbanización El Bosque. «Lo saben más la gente que vive aquí. Vengo aquí a la peluquería y poco más; a lo mejor a comprar algo pero en realidad tengo en El Bosque el Mercadona y ahí no hay escaleras. Cuando yo vengo lo veo fenomenal porque hay plazas para discapacitados, aunque muchas veces están ocupadas por gente que no lo es, eso también es cierto».
Sobre su último libro, Nunca es demasiado tarde, princesa, del que ya habló en una entrevista en Villaviciosadigital se mostró «encantada» por lo que la gente dice. «Los comentarios de la gente son flipantes, de cómo les motiva y les ayuda en su vida diaria, en su relación de pareja, con sus hijos, en su trabajo. He conseguido el objetivo, que es un poco el del psicólogo; ayudar a la gente a romper sus prejuicios, sus barreras, a ser más feliz, a tener más habilidades sociales; a que la gente diga `no me voy a enfadar tanto, o no me voy a cerrar esta puerta; o voy a perdonar mis errores para poder perdonar también a los otros».
Ese éxito de Irene no la ha afectado, pese a que miles de personas la ven como un merecido ejemplo de superación, no la pesa esa responsabilidad. “Nunca la he sentido porque es una forma de vida, la filosofía de vida que me ha inculcado mi madre y que pienso que funciona”.
La importancia de la fe
Pese a que Villa es una humanista reconocida, la fe también ha sido un bastón esencial en su vida. “La bandera de mis conferencias de mi vida no es tanto Dios como el ser humano, como buena humanista que soy. Pero a mí me ha ayudado; donde no llega el ser humano llega Dios. Hay cosas que se nos escapan. Por ejemplo, con una bacteria que tuve, por una infección muy horrible, ahí tuve que echar mano de la fe porque ya no me quedaba otra, ni medicina, ni operaciones. O sea, rezar y pedir tantas cosas que no están en nuestra mano; otro ejemplo, este niño que espero. Ahí siempre digo que la fe te cura y la fe te da una recompensa que no te da lo terrenal», concluyó.
El acto contó con la presencia de la concejala de Bienestar Social, María del Carmen Alonso, organizadora del mismo. Sobre Mercedes Rodríguez, presidenta de Integravilla, destacó su labor “encomiable” junto a la asociación que dirige «por luchar en esta causa en la que todos debemos implicarnos, ya que cualquier persona en un momento determinado puede verse afectada por algún tipo de barrera”.
Además, agradeció la presencia de los asistentes para conmemorar este día que supone un “auténtico homenaje a las personas que se ven afectadas por algún tipo de discapacidad”. De todos ellos y de sus familiares y amigos, la edil resaltó su esfuerzo y lucha “por salvar los muchos obstáculos con los que se encuentran a diario”. Igualmente destacó “la su gran capacidad de unión y el sentido asociativo de este tipo de personas siempre concienciadas por apoyar a los demás en su misma condición”.
La concejal destacó los “muchos esfuerzos” que se han realizado en estos últimos años desde la administración bien sea a través de la legislación, el empleo, la educación, etcétera. No obstante, reconoció que “aún queda mucho por hacer. Solamente con una plena inclusión seremos capaces de decir que hemos eliminado las barreras que impiden a las personas desarrollar su vida con plena normalidad y armonía”. Para concluir, expresó la siguiente afirmación: “No hay personas con discapacidad sino entornos y actitudes adecuadas o inadecuadas”.
IRC/Prensa Ayto.
Fotos: Prensa Ayto/IRC