Nuevo fin de semana de estrenos en un mes de octubre pródigo en propuestas interesantes y diversas. Un título destaca por encima de las demás novedades: Capitán Phillips, el nuevo thriller del excelente realizador Paul Greengrass (autor de dos capítulos de la saga Bourne) y que sitúa a Tom Hanks como capitán de barco.
En el año 2009, en aguas internacionales cercanas a Somalia, el buque carguero Maersk Alabama, al mando del capitán de la marina mercante estadounidense Richard Phillips, fue retenido por piratas somalíes, convirtiéndose en el primer barco norteamericano secuestrado en doscientos años.
Esta es la odisea que relata el nuevo filme de Greengrass, que vuelve a demostrar su gran pulso para la acción y el suspense. Sin embargo, lo que en Bloody Sunday o United 93 era una experiencia de inmersión total en la historia, manteniendo la tensión de principio a fin ante el aluvión y los golpes de los duros hechos reales, aquí está resuelto de manera más desigual.
El metraje de Capitán Phillips se alarga demasiado y, mientras el abordaje al barco resulta impecable, la segunda parte de la cinta en el bote resulta menos eficaz y sorprendente. Del mismo modo, la historia no logra conmover al nivel de los precedentes del director pese al buen hacer de Hanks.
La labor periodística
Otro estreno llamativo, y que viene acompañado de polémica, es el de El quinto poder, el filme que aborda el caso WikiLeaks. Julian Assange y Daniel Domscheit-Berg crearon una plataforma con el objetivo de denunciar los abusos del poder de forma anónima y filtrar información secreta. El resultado fue el aireamiento de la mayor cantidad de documentos confidenciales de la historia de los servicios de inteligencia de los Estados Unidos.
El filme, que fue proyectado en el Festival de Toronto, no llega acompañado de buenas críticas y ha despertado la ira del propio Assange que, desde su confinamiento en la embajada de Ecuador de Londres para evitar ser detenido, escribió una carta para mostrar su disconformidad con el enfoque de la trama y pidió al actor Benedict Cumberbatch (protagonista de la serie Sherlock y que da vida al periodista australiano) que se replanteara su carrera en Hollywood.
El estreno español de la semana, y muy bien recibido por los especialistas, es Todas las mujeres. Cuenta el caso de Nacho, un veterinario, que se enfrenta a las mujeres que han significado algo en su vida. Ante él aparece su amante, su madre, su psicóloga, su compañera, su ex-novia y su cuñada. Con todas ellas tiene cuentas pendientes y a todas ellas se tiene que enfrentar para resolverlas.
Este proyecto nació hace tres años como una serie de televisión que ahora el director Mariano Barroso (autor de Los lobos de Washington y Hormigas en la boca) ha querido convertir en largometraje. El protagonismo absoluto recae en Eduard Fernández, que lidia con un grupo de féminas compuesto por Michelle Jenner, Nathalie Poza, Petra Martínez, María Morales, Marta Larralde y Lucía Quintana.
Amor en el tiempo y animación
Tim Lake (Domhnall Gleeson) es un joven de 21 años que descubre que puede viajar en el tiempo. Su padre (Bill Nighy) le cuenta que todos los hombres de la familia han tenido desde siempre ese don, el de regresar en el tiempo a un momento determinado, una y otra vez, hasta conseguir hacer «lo correcto». Así pues, Tim decide volver al pasado a intentar conquistar a Mary (Rachel McAdams), la chica de sus sueños.
Este es el argumento de Una cuestión de tiempo, el nuevo trabajo del realizador Richard Curtis (Love actually) destinado a aquellos que quieran pasar un rato agradable gracias a una historia con la que es fácil empatizar y que viene avalada por el premio del público en el Festival de San Sebastián.
Por último, llega Turbo, la nueva cinta de animación de los estudios Dreamworks (creadores de Los Croods) que cuenta la historia de un caracol de jardín con un sueño imposible: convertirse en el caracol más rápido del mundo.
Cuando un extraño accidente le da el poder de la súper-velocidad, Turbo intentará cumplir su sueño. Primero se hará amigo de una peculiar pandilla de caracoles callejeros tuneados y obsesionados con la velocidad, y después tratará de alcanzar su meta ganando las 500 millas de Indianápolis.
Texto: Jaime Soteras (@JaimSot)
Foto: Sony