Desde este martes, para las infracciones de velocidad que detecte este dispositivo que está situado a la altura de Batán, entre el punto kilométrico 4 y el 5,750 en dirección Extremadura.
El radar de tramo, que está en funcionamiento desde el pasado 15 de febrero en periodo de aviso para “aumentar la seguridad de peatones y conductores y reducir los efectos ocasionados por el ruido del tráfico sobre los edificios cercanos”, según el área de Medio Ambiente y Movilidad, tendrá todos su efectos desde este martes 16 de abril. De tal manera que inicialmente quienes superen los 70 kilómetros por hora en esa zona, recibirán multa. Está previsto que cuando se complete la transformación de la A-5 en vía urbana, el máximo será de 50 Km/h.
Durante el periodo de pruebas y hasta el pasado 10 de abril hubo 27.712 conductores que superaron el límite de velocidad.
Junto a esta medida, Ahora Madrid y PSOE han iniciado el proceso de conversión de esa autovía entre Cuatro Vientos y Batán mediante semáforos, una medida que ha provaco el rechazo de los ayuntamientos cercanos a la capital como Alcorcón, Móstoles, Boadilla del Monte, Villaviciosa de Odón, Pozuelo de Alarcón o Leganés, entre otros.
Por ese tramo circulan actualmente alrededor de 125.000 vehículos, muchos de ellos provinientes de esas localidades cercanas a Madrid que suman unos 500.000 habitantes.
