Agentes de la Guardia Civil detuvieron el pasado día 16 de noviembre a un conductor de un vehículo que colisiono en la carretera de Extremadura con otro automóvil en un control de alcoholemia. La conductora que sufrió el impacto tuvo que ser evacuada a un centro hospitalario madrileño a causa de las lesiones.
El detenido circulaba a 163 km, en una vía de 70 km, y triplicaba la tasa de alcoholemia.
Los hechos tuvieron lugar pasadas las cuatro de la madrugada, a la altura del punto kilométrico nueve de la carretera de Extremadura, donde la velocidad en el tramo donde estaba ubicado el control de alcoholemia, está limitado a 70 km/h. En ese momento, un vehículo que circulaba a 163 km/h, impactó contra el vehículo a cuyo conductor se le estaba realizando una prueba de alcoholemia por la Guardia Civil.
Tras este impacto, el conductor fue sometido a las pruebas de alcoholemia, quién alegó no haberse percatado del control que estaba correctamente señalizado, dando como resultado 0,68 miligramos de alcohol por litro de aire expirado, lo que supone que prácticamente triplicaba la tasa de alcohol permitida.
Tras ser atendido por los servicios de emergencia, se procedió a la detención de esta persona, un varón de 26 años quien ha sido puesto a disposición judicial.
Al detenido le han imputados dos delitos contra la Seguridad Vial, uno por conducir de forma temeraria y otro por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, según establecen los artículos 379 y 380 del código penal, que castigan con penas de prisión de nueve mes a dos años y medio y pérdida del permiso de conducir de dos a nueve años, además de otras accesorias.
