Agentes de la Policía Nacional junto a Guardia Civil y Agencia Tributaria, en cuatro registros en las provincias de Málaga y Granada y en la Comunidad de Madrid.
La investigación se inició en febrero de este año cuando los agentes fueron alertados por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios que habían descubierto en unas pastillas adelgazantes un compuesto anfetamínico que podría causar un grave riesgo para la salud. Asimismo, detectaron la existencia de varias denuncias interpuestas por diferentes personas que habían tenido problemas de salud por el consumo.
Las pesquisas policiales permitieron a los investigadores conocer de manera exhaustiva el funcionamiento de la organización, logrando además identificar a la totalidad de los miembros que la conformaban. Asimismo, averiguaron que los componentes utilizaban las redes sociales y páginas web para contactar con potenciales clientes. Amparándose en el anonimato aportaban datos falsos para dificultar una posible acción policial.
Tras identificar al presunto responsable, localizaron el lugar que funcionaba como centro de operaciones del entramado, tratándose de una clínica estética. Desde allí se comunicaban con los fabricantes de las pastillas, que se encontraban ubicados en Turquía. Posteriormente, les facilitaban datos de personas vinculadas con la organización criminal que se encargaban de la adquisición y distribución.
Avanzando con la investigación, los agentes intervinieron en el Aeropuerto Adolfo Suárez – Madrid Barajas, cuatro maletas que contenían en su interior más de 120 kilogramos de productos cosméticos entre los que se encontraban las pastillas adelgazantes.
Además, una de las líderes de la organización denunció que parte de los integrantes, mediante la estafa del nazareno, le habían dejado una deuda de 460.000 euros en la compra de productos cosméticos. Los agentes pudieron constatar así la relación existente entre la líder y el resto de miembros de la banda, así como la posterior escisión del entramado debido a estos hechos.
Finalmente, tras identificar la estructura criminal, y ante el grave riesgo que suponía para la salud de posibles consumidores, los agentes culminaron la investigación con la realización de cuatro registros en las provincias de Málaga, Granada y en la Comunidad de Madrid. En ellas se incautaron casi 10 kilogramos de sustancia estupefaciente, un arma de fuego, más de 500.000 pastillas, un vehículo de alta gama y 200.000 euros.
Además, bloquearon nueve cuentas bancarias y detuvieron a 20 personas, que fueron puestas a disposición judicial como presuntas autoras de delitos contra la salud pública, contra los consumidores, blanqueo de capitales, estafa y pertenencia a organización criminal.