La llamada de una vecina permitió movilizar a los efectivos policiales y que estos atrapasen a los presuntos delincuentes antes de que abandonaran el edificio.
La detención se produjo sobre las 17.30 horas del domingo, después de que la mujer alertase por teléfono a la Policía Municipal. La señora afirmó que había visto, a través de la mirilla de su puerta, a un individuo que parecía estar manipulando la cerradura de una de las viviendas de sus vecinos, y que estaba tratando de introducir una especie de placa por el marco de la puerta.
Una patrulla se trasladó al inmueble y sorprendió a dos sujetos que bajaban la escalera de forma apresurada, uno de los cuales llevaba la misma ropa que había descrito la vecina que alertó a la Policía. Ambos esgrimieron sendas identificaciones, que resultaron ser falsas y que despertaron de inmediato las sospechas de los agentes. La documentación mezclaba el escudo del Ejército de Tierra con una tarjeta del Cuerpo Nacional de Policía. Además, se contradijeron y ofrecieron extrañas explicaciones de su presencia en el inmueble.
Así las cosas, los agentes procedieron a su cacheo y les intervinieron un juego de 15 llaves, dos tarjetas de plástico, que podrían ser la “placa” que utilizaría el presunto ladrón para intentar hacer saltar el resbalón de las cerraduras, y sendas armas blancas, entre otros efectos.
Ante estas evidencias, ambos sujetos fueron detenidos, y, ya en comisaría, identificados por la vecina que había llamado a la Policía y por otra que también había visto cómo intentaban abrir otra puerta del mismo inmueble.
La Policía sospecha que estos individuos, y un tercero que fue visto con ellos en la zona poco antes de la detención, podrían haber realizado asaltos a viviendas en toda la zona Sur, por lo que se están contrastando huellas y datos con el Cuerpo Nacional de Policía y con policías locales.